En la Estación Espacial Internacional han comenzado los preparativos para poner a prueba las capacidades de un robot que reparará los satélites en el espacio. Esta es una gran noticia porque al día de hoy los satélites enviados al espacio con muy distintos propósitos tienen una vida útil previamente establecida, que una vez cumplida no hay nada más que hacer, dejan de funcionar y dan vueltas a la órbita terrestre una y otra vez.
Actualmente ya hay proyectos en marcha que buscan eliminar toda esa basura espacial que se ha ido acumulando a lo largo de los años, y eso es bueno; pero también es importante comenzar a construir satélites que puedan ser reparados de manera que su vida útil se alargue y la cantidad de artefactos inservibles en la órbita del espacio no aumente a tal grado que sea un peligro aún mayor de lo que es hoy día para los astronautas.
La Robotic Refuiling Mission tiene una gran importancia porque de los resultados que arroje se podrán obtener datos concluyentes sobre si la tecnología ya está lo suficientemente desarrollada para lograr reparar satélites en el espacio. El robot que se probará se denomina Dextre y ha sido manufacturado por la agencia espacial de Canadá.
Los datos del desempeño de Dextre serán analizados en conjunto por la agencias espaciales de Estados Unidos y Canadá. De hecho los componentes para la misión están en el espacio desde hace meses, ya que fueron llevados por la última misión de los transbordadores espaciales.
Es verdad que la NASA ya ha hecho algunas pruebas en años anteriores para tratar de reparar satélites en órbita, pero dichas pruebas siempre habían sido con artefactos preparados para ello, es decir, que se conocían las causas de sus fallas. En esta ocasión será la primera vez que se haga una misión de este tipo en la cual se tratará de reparar un objeto cuyas fallas no se conocen con exactitud.