En la actualidad la ingeniería a nivel mundial está atravesando una situación de mucho contraste. Por un lado hay demasiados ingenieros sin empleo o con empleos mal pagados. Por el otro hay una falta de ingenieros preparados y los que hay reciben excelentes sueldos. Puede parecer una contradicción que existan tantos ingenieros desempleados y que al mismo tiempo existan muchas vacantes que no han sido cubiertas. ¿Cómo se puede explicar esto?

Son muchos los factores que determinan esta situación, uno de los cuales tiene que ver con los mercados laborales locales. Basta analizar el siguiente ejemplo. En promedio en China egresan cada año 300,000 ingenieros mientras que en México la cifra es de apenas 40,000. Estamos hablando que nuestro país produce apenas 13% de los ingenieros que produce aquel país asiático, pero ellos no tienen problemas graves de desempleo como se podría pensar.

La cuestión es que China se ha convertido en la primera superpotencia mundial y desde hace algunos años presenta un desarrollo de infraestructura asombroso. Esto implica que todos los egresados de ingeniería tienen cabida en las industrias porque alguien tiene que sostener el enorme crecimiento que está experimentando el país. En México no se están desarrollando las industrias a un ritmo aceptable y por ello no hay cabida para todos en las empresas.

El apogeo actual de la ingeniería también está ocurriendo en Estados Unidos, Alemania, Japón y otros países desarrollados, donde existe una pelea sin cuartel para reclutar a los ingenieros con experiencia que hay. En Estados Unidos inclusive existen cazatalentos encargados de reclutar a los mejores ingenieros. Desafortunadamente la situación es distinta en los países en vías de desarrollo, donde los ingenieros no son tan valorados y eso frena el desarrollo nacional.

En especial en Estados Unidos existe una fuerte demanda de ingenieros capacitados pero estos no cubren la demanda de las empresas. La escasez de ingenieros actual es una de las consecuencias del boom tecnológico experimentado a partir de 1990. Al ser testigos del desarrollo tecnológico una gran cantidad de estudiantes se decidieron en aquellos años por estudiar una carrera en nuevas tecnologías. Así se perdieron muchos posibles estudiantes de ingeniería.

Por supuesto que la ingeniería ha vuelto a ser una de las mejores opciones para quienes quieran estudiar una carrera universitaria, sobre todo en Estados Unidos, donde siete de las diez mejores carreras en lo que respecta a ingresos económicos son ingenierías. Situación similar es la que se vive sobre todo en países como Alemania y Japón, cuyo nivel de formación en ingeniería es bastante bueno por la exigencia que representan.