Por lo general los planes de estudio de ingeniería no contemplan asignaturas relacionadas con economía. Si lo hacen suele tratarse de no más de un par de ellas enfocadas a cuestiones sumamente básicas. En perspectiva comprendo el gran error que esto implica. Por supuesto cuando estaba en la carrera no le veía mucha importancia, pero ahora entiendo lo bien que me hubiese venido un poco más de formación en aspectos económicos.

Si eres estudiante de ingeniería es posible que, como la gran mayoría, no comprendas la importancia de saber de economía. Si por el contrario eres un profesionista de la ingeniería quizá ya hayas tenido necesidad de comprender cuando menos los conceptos más básicos. ¿En estos momentos crees que la formación económica es algo que los ingenieros estamos necesitando?

¿Qué implica la nueva economía para los ingenieros?

Hoy más que nunca la idea de seguridad laboral ha perdido vigencia. Tener un empleo estable pertenece a un sistema que está en proceso de quedar obsoleto. Estabilidad es una de las palabras que no representan nada ante una crisis económica. Ya ni los profesionistas que llevan 30 años es una empresa están a salvo.

Todo el mundo es prescindible, más que nunca. Varios años en una empresa no garantizan el empleo. En algún momento podría llegar un recién egresado que cobre 3 veces menos por hacer lo mismo. No es algo que las empresas quieran hacer, pero cuando se vean en problemas económicos seguramente lo harán. El empleo estable ha muerto. Bienvenido a la nueva economía.

La formación de los ingenieros podría ser una desventaja

No queda ninguna duda que la formación académica actual que reciben los ingenieros en América Latina está enfocada en formar buenos recursos humanos para las empresas. Ser un emprendedor no es el sueño ni del 1 por ciento de los egresados de ingeniería. En nuestra mente solo tenemos una cosa cuando egresamos: ubicarnos en una buena empresa.

Esta formación no ha variado en un siglo. Desde la Revolución Industrial el objetivo es formar personal capacitado para las industrias. Sin duda se estaba haciendo bien, pero ahora los paradigmas han cambiado, la realidad está cambiando y el peligro es que los sistemas educativos de ingeniería siguen ajenos a dicho cambio. “Ingeniero emprendedor” no es un término que se escuche mucho. ¿Verdad?