Enviar algo al espacio no era lo más barato que uno pudiera imaginar hace apenas algunos años, aunque hoy día el precio ha bajado considerablemente aún me parece un tanto prohibitivo; es gracias a empresas privadas que cada vez va siendo más accesible transportar algo hacia allá arriba.

Empresas privadas como Interorbital Systems o Bigelow Aerospace han logrado poner el precio de transportar algo al espacio por debajo de los 500 dólares los 500 gramos; sin embargo, en este sentido Masten Space Systems se lleva las palmas pues ofrece por 99 dólares enviar un máximo de 450 gramos.

David Masten

Esto gracias a que tienen un sistema llamado “Sodasat” en el que puedes enviar lo que quepa en el contenido de una lata de refresco, siempre y que no pase del peso mencionado, y claro, que no sea contenido peligroso (explosivo, radioactivo, por ejemplo). De hecho es posible enviar hasta bacterias, pues la lata va presurizada.

Masten Space Systems es una empresa surgida en 2004 y cuyo fundador es David Masten, quien se encuentra desarrollando una buena variedad de cohetes reutilizables, entre los que sobresale el eXtreme Altitude o XA 1.0, un cohete suborbital de despegue y aterrizaje vertical, que solo necesita reportar oxígeno líquido y alcohol isopropil para volver a despegar pasadas tres horas del último aterrizaje, nada mal eh.

Vía: Xataka Ciencia