El grafeno ha sido nombrado como ‘el material del futuro’ porque presenta infinidad de usos potenciales, muchos de los cuales nos han asombrado en verdad. En este blog no nos es ajeno y con relativa frecuencia aparece algo relacionado con dicho material; es verdad que aún la mayoría de sus posibles aplicaciones está en desarrollo pero el simple hecho de que se logren al menos la mitad de ellas me emociona.
El más reciente uso para el grafeno es bastante sorprendente: desalinizar agua. Un par de investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusttes (MIT, por sus siglas en inglés) han logrado filtrar agua de mar y convertirla en agua potable; según los datos mostrados de sus primeras pruebas los científicos afirman que los nanoporos del grafeno pueden filtrar agua de manera muy eficiente.
De hecho los expertos dicen que con este material se puede filtrar agua de 2 a 3 veces más rápido que con la tecnología desalinizadora más actual, a un precio mucho menor por supuesto, lo cual representaría una verdadera revolución hídrica para lugares con muy poca cantidad de agua potable, pero que se encuentran cerca del mar.
Las pruebas que indicarán las capacidad del filtración del grafeno serán realizadas en los próximos meses, por lo que de dar resultados positivos lo único que falta para que sea una realidad aplicable en todo el mundo es: que la humanidad pueda fabricar grafeno de forma ecnónima.