No es una novedad, que a pesar del inmenso tamaño de China, sus ciudades están sobresaturadas. Si hablamos de Pekín el problema es inmenso, pues a solo unos años de la inauguración de su nuevo aeropuerto, este se ha quedado corto para la cantidad de personas a las que hay que atender. Por esto ya se está planeando otro nuevo aeropuerto.

Como el problema se vislumbraba desde hace años, fue en 2011 cuando el gobierno de la ciudad convocó a licitación para construir el nuevo aeropuerto. Así fue como las empresas que se adjudicaron el proyecto fueron ADP Ingeniérie y Zada Hadid Architects. Y lo que destaca de todo es lo impresionante que será la construcción.

El nuevo aeropuerto tendrá una superficie de 700,000 metros cuadrados, lo que lo colocará como el aeropuerto más grande del mundo, incluso por arriba del aeropuerto de Estambul, que se espera tenga apenas 555,000 metros cuadrados. Sin embargo, lo mejor es que no será un aeropuerto solamente, sino un centro de comunicaciones de la ciudad.

De la superficie total, 80,000 metros cuadrados serán destinados a la nueva red de transporte de la ciudad, que conectará principalmente este aeropuerto con el actual, además de con el centro financiero, y con el centro de la ciudad. El plan es que el nuevo aeropuerto esté listo en 2018, y tenga la capacidad de dar servicio a 45 millones de pasajeros anuales.

Vía | Xataka