Por fin pudo despegar el cohete Falcon 9 de la empresa aeroespacial privada SpaceX, el cual llevaba a bordo a la cápsula Dragon, que después de una serie de pruebas obtuvo autorización para atracar en la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés). Apenas ayer viernes 25 de mayo de 2012 la primer nave espacial privada llego al complejo orbital.
Un tanto curiosas las palabras pronunciadas por Don Pettit, astronauta estadounidense que abrió la escotilla de la Dragon a las 5:53 ET, pues dijo “huele a coche nuevo”. Junto con Pettit se encontraba el cosmonauta ruso Oleg Kononenko, quien actualmente funge como comandante de la estación.
Ambos habitantes de la ISS llevaban gafas y máscaras cuando ingresaron a la nave para inspeccionar que todo estuviera en orden. La inspección fue realizada de manera rápida y sin ningún contratiempo. La tripulación deberá descargar cerca de 450 kilogramos de cargamento, que incluye comida, ropa, computadoras y suministros para hacer experimentos.
Cuando hayan descargado todo los astronautas volverán a cargar la cápsula espacial con cosas y experimentos que mandaran de nuevo a la Tierra, aunque como ocurrió con el viaje de idea, no cargarán nada de importancia, pues aún falta la prueba del aterrizaje, la cual deberá superar la nave privada para demostrar su fiabilidad.
Será el 31 de mayo cuando la cápsula reingrese a la atmósfera y caiga en el Océano Pacífico a algunos cientos de kilómetros de la costa de California. Esperemos que la última parte de la misión ocurra sin contratiempos.
Vía: CNN Español