Si hay una palabra en la que pienso inmediatamente se habla de ingeniería esa es velocidad; quizá sea cosa mía pero la velocidad representa uno de los grandes retos ingenieriles de todos los tiempos. Ir más rápido implica muchos aspectos: mejores máquinas, mecanismos eficientes, aprovechamiento de los combustibles, buen diseño, etc. Además, el simple hecho de superar un récord de velocidad es ya en si mismo emocionante.
Es por todo lo anterior que el Bugatti Veyron Super Sport llama mucho la atención, siendo el auto de producción más veloz del planeta al haber alcanzado la escalofriante cifra de 431 kilómetros por hora. Sin embargo, recientemente un rival le ha plantado batalla y lo ha derrotado, aunque no de manera oficial solo debido a un pequeño detalle. Se trata del Hennessey Venom GT, que alcanzó los 435.31 kilómetros por hora.
La prueba fue realizada en el Centro Espacial John F. Kennedy y los responsables del Venom dicen que de haber tenido una milla más de pista su vehículo hubiese logrado los 450 kilómetros por hora. El pequeño detalle es que este nuevo récord no será reconocido de manera oficial, en parte por que el recorrido debe hacerse de ida y vuelta, siendo que el Venom solo realizó una pasada, y por otra parte está que no se considera un vehículo de producción comercial.
Para que un vehículo se considere de producción comercial deben fabricarse al menos 30 unidades, y del Venom solo se fabricarán 29, lo que seguramente estaba ya pensado por los responsables, pues no creo que los costara mucho construir una unidad más para así hacerse con el récord; pero hay quienes sabiéndose mejores se dan por bien servidos sin tener que presumir un reconocimiento oficial.
¿Necesitamos vehículos tan veloces? No y si. No porque realmente nadie se desplaza en un vehículo a dicha velocidad, ya que si así fuera el número de accidentes mortales aumentaría. Y sí porque aunque no sean de gran utilidad en forma directa, indirectamente se repercute positivamente en el desarrollo de muchos aspectos del sector automotriz. De esta forma quizá parezcan una capricho muy caro, y lo es, pero tras esto quedan muchas cosas positivas.
Vía: Motorpasión