El biocombustible, ¿sostenible y ético?

El otro gigante de Asia, la India, ha manifestado su total desacuerdo con la producción de biocombustibles, una tecnología en la que países como España han invertido e invierten mucho dinero. Así se lo ha hecho saber el ministro de finanzas indio, Palaiappan Chidambaram, en un congreso con empresarios españoles celebrado en Madrid. En palabras del susodicho, representa un “crimen contra la humanidad” el hecho de producir y subvencionar biocombustibles cuando hay países como el suyo en los que la media familiar de presupuesto dedicado a la comida es del 60 %.

Quizá se excedió en las formas pero tiene mucha razón. Y es que el problema es la crisis alimentaria mundial de la que ya estamos empezando a notar los primeros coletazos y que se recrudecerá en este año. Las tierras dedicadas a cosechar para biocombustibles no lo hacen para alimentos, y esto significa una menor oferta, pero la demanda es siempre creciente. Y por tanto, los precios crecen igualmente.

Visto en Expansión.