Es bien sabido por todos que Google está desarrollando un vehículo autónomo. El tema de este tipo de vehículos resulta interesante por cualquier parte que se le vea, y es una cuestión que requiere buenas soluciones porque parece que la tecnología estará muy pronto disponible en el mercado. Pero quizá el aspecto más importante es la seguridad.
El hecho de que el vehículo sea verdaderamente autónomo está muy avanzado, por lo que la seguridad comienza a preocupar, en especial la seguridad de los peatones. ¿Qué pasará cuando un vehículo autónomo atropelle a una persona? ¿De quién va a ser la culpa? Estas cuestiones legales están lejos de responderse, pero mientras Google toma la batuta.
La empresa del buscador presentó una patente en septiembre de 2013, la cual ha sido aprobada recientemente. La patente implica una bolsa de aire en el frente de los vehículos autónomos, específicamente en la defensa, de modo que en caso de colisionar con un peatón este sufra el menor daño posible. Eso si, no es la primera idea de este tipo.
Otras empresas habían propuesto algo similar, aunque en dichos casos la bolsa de aire salía del capó, y la idea de Google es la primera donde la bolsa de aire se ubica en la defensa. La primera ventaja de esta bolsa de aire es que se podría utilizar más de una vez, según indican desde la empresa. La segunda es que no presentaría rebote.
La idea es que la bolsa de aire se fabrique a partir de un material viscoelástico, de modo que absorba la energía del impacto. Así el peatón no saldrá volando por los aires. Cabe aclarar que de momento es una mera patente, aunque no veo un impedimento por el cual esta airbag no se pueda instalar en cualquier automóvil.
Vía | Xataka